miércoles, 19 de diciembre de 2012

EL INGREDIENTE







La primera vez que le comenté a mi mujer que mi mayor fantasía era verla con otros hombres, se rió y se lo tomó a broma.

NO, no era una broma

La segunda vez, se puso algo más seria y me soltó esa frase que seguro le sonará a alguno, “tu lo que quieres es acostarte también con otras mujeres”

NO, no era lo que quería, mi fantasía es exclusivamente con ella.

La tercera vez…  se enfadó. Entonces salió con eso tan típico de “si eso es lo que deseas, es que no me quieres”

NO, ella volvía a equivocarse. Claro que la quiero y mucho, pero como explicarle a tu pareja, que se pone tan a la defensiva, el porqué quieres que esa fantasía llegue a hacerse realidad.


Así que intenté exponérselo de la mejor manera posible.

Mi fantasía es un coctel de sentimientos, Hay que mezclar unas dosis de excitación, morbo, placer, pero también nervios, miedo y celos.
Si, celos, una pizquita, una gotita nada más en esa coctelera,  creo que es el ingrediente clave.

No soy una persona celosa, ni mucho menos, pero pensar a mi mujer follando con otro hombre me produce además de mucho placer y excitación, un pequeño nudo en el estomago producido por ese puntito de celos.
Y esos celos vienen por el amor. Si no la quisiese no me pondría celoso, no tendría esa sensación tan extraña y maravillosa a la vez.
Porque veamos, he visto a otras parejas follando, en internet, en pelis… pero el sentimiento no es el mismo. Me puedo imaginar haciendo un trío con otra chica y sí, me puedo poner cachondo y excitarme, pero NO, no es lo que siento cuando fantaseo con ella.

Y así se lo he dicho y se lo he explicado, que la quiero y que  por eso, esa fantasía me produce tanto placer, porque si no la quisiera si no me importase nada, al imaginármela gozando con otras pollas, no me excitaría nada.
Y que para ella sería todo el placer físico, y para mi quedaría un placer mucho más psíquico.
Y que quiero y deseo probar ese coctel.

Después de hablar todo esto con ella, ha entendido mis sentimientos, sabe que si lo deseo es por eso, porque la quiero, sino el morbo no sería ni siquiera la décima parte. Y ya no piensa que soy un enfermo, solo que mis fantasías son un poco raritas (aunque yo le insisto que no tanto).

Por supuesto, aún no está decidida a que esto llegue a ser realidad, pero cada paso adelante es un avance importante.

martes, 18 de diciembre de 2012

UN VIEJO AMIGO





Hace unos meses me encontré con un viejo  amigo al que hacía tiempo que no veía.
Ahora por motivos de trabajo ya no vive en la ciudad, así que estuvimos  charlando un buen rato y para ponernos al día le propuse quedar el fin de semana para ir a cenar  y salir a tomar algo.

Al  llegar a casa le dije a mi mujer que me había encontrado a Raúl y que  le había invitado a cenar y a salir a tomar algo y que le había ofrecido quedarse en casa, para que no tuviese que conducir después de tomarnos un par de copas.

A ella le pareció bien. A mi mujer  y a mí nos unía una buena amistad con Raúl y su esposa. Solíamos salir a menudo los cuatro y tenemos pasado muy buenos momentos. El caso es que desde que ellos se divorciaron y mi amigo se fue a vivir a otra ciudad habíamos perdido un poco el contacto.

Así que pasaron los días y llegado el fin de semana nos encontramos los tres. Nos tomamos algo en casa y salimos a cenar.

La cena fue muy distendida y agradable y transcurrió recordando viejas anécdotas tanto de  mi amigo y de mi, (que ya nos conocíamos de  antes de tener parejas) como de la época en que salíamos los cuatro.

Tras la cena nos fuimos a un local tranquilo a tomar una copa y a seguir la noche.  Ahí la conversación cambió un poco y Raúl comenzó a contarnos que desde que se había separado le iba muy bien. Que de momento no pretendía volver a emparejarse y que se dedicaba a salir y pasarlo bien sin más. Nos contó que  había encontrado una “follamiga” como se les llama ahora y que estaba encantado.
La conversación se volvió más picante y nos confesó  que con ella había realizado algunas de sus fantasías sexuales que con su mujer no había logrado.

En un momento dado, me fui a la barra a pedir unas copas y los dejé allí solos. Mientras me atendían se me encendió una lucecita. Si amigos; mi gran fantasía es ver a mi mujer con otro hombre, es ser cornudo y hasta ese momento no se me había ocurrido lo morboso de la situación. Ahí estaba yo  en la barra pidiendo bebidas para los tres mientras mi mujer y mi amigo estaban solos en una esquina hablando de sexo tranquilamente.
Lo cierto es que en mis planes de hacer mi fantasía  realidad siempre pensaba en alguien alejado de nuestro circulo, en alguna persona con la que no tuviésemos una relación previa y eso creo que me había bloqueado hasta ese momento.

Cuando regrese junto a ellos seguían con las risitas y la conversación subida de tono. Iria me conto que siguiendo con el tema fantasías le había contado a Raúl la mía. Yo la verdad me quedé bastante cortado. Mi amigo me dijo que con el pedazo mujer que tenía esa fantasía no sería difícil de realizar y concluyo con un “si quieres voluntarios, para eso están los amigos”
Os tengo que confesar que la vergüenza fue desapareciendo para dejar paso  a la excitación. Tuve que  acomodarme un poco para disimular la erección que  empezaba  a asomar entre mis piernas.

A partir de ese momento me propuse desaparecer cuanto pudiese, para ir a pedir, para ir al baño…, cualquier excusa era buena  para que  dejarlos a solas y que mi mente siguiese trabajando en el morbo. Sabía que  mis fantasías no se harían realidad pero la excitación de que ellos estuviesen juntos hablando y bailando en la pista era tremenda.  No dejaba de estar empalmado.  Llegó un momento en que me apartaba tanto de ellos que parecía no existir  y parecían pasarlo tan bien juntos que era maravilloso.
Y acabó la fiesta y decidimos irnos a casa. Yo seguía  callado y dejándolos a su aire y ellos continuaban  con sus conversaciones y sus risas.
Y  llegamos a casa, alguien propuso tomar la última, así que fuimos a la sala, me dirigí al mueble bar a preparar las bebida.

Y pasó....

Al girarme estaban ambos en el sofá besándose apasionadamente. Raúl tenía una mano por debajo de la blusa de mi mujer, tocándole los pechos. La mano de ella le manoseaba el pantalón, intentado abrírselo para alcanzar a tocar su polla.
Yo estaba de pie, quieto, inmóvil, sin reaccionar

Raúl le sacó la blusa y comenzó a comerle los pezones, ella  gemía, eso le encanta y estaba claro que estaba disfrutando bastante.  Todo  lo recuerdo como flashes, la excitación, el morbo, el alcohol…
Ahora el ya no tenía los pantalones y disfrutaba de la atenciones que mi mujer y su lengua le brindaban a su polla.

Al cabo de unos minutos, ella se levantó y vino hacia mí, me pidió que le alcanzase el bolso que quería coger los preservativos que había  comprado el día anterior. Ese simple detalle fue brutal para mi, ya que nosotros NO utilizamos condones, con lo cual esto que  estaba pasando no era algo espontaneo ni fruto de una noche loca. Noté la polla más dura que nunca.

Cuando le di el paquete me sonrió y me dijo que se iba a la cama a follar y que por supuesto eso no iba a ser conmigo. Y que tampoco iba a poder verlo que de momento me tendría que conformar con seguir imaginándolo.

Tomó a Raúl de la mano, se fueron al dormitorio y cerraron la puerta.
Yo me senté en el sofá y comencé a masturbarme mientras escuchaba los gemidos de ambos. Se escuchaba el golpeteo de ambos cuerpos al follar, cerré los ojos para imaginarme a mi mujer siendo follada por otro y sentí la leche caliente resbalando por mi mano….

martes, 11 de septiembre de 2012

CON QUIEN




 Una de las cuestiones que me planteo en ocasiones mientras pienso en esta fantasía mía es, ¿con quién me gustaría compartir a mi mujer?

Aquí hay dos opciones:

Si ella accediese a esto y decidiese poner  las reglas y tomar las decisiones, sería con quien mi mujer quisiera y yo no tendría otro remedio que aceptar sin más. Y desde luego lo haría encantado.

En caso de poder elegir yo, siempre he pensado que sería preferible una persona ajena a nuestro círculo cercano. Que no hubiese ninguna relación afectiva previa y que se tratase simplemente de algo físico.

Si, tantas veces me he imaginado como viajábamos una fin de semana a alguna localidad distinta a la nuestra y como quedábamos con la otra persona y como he imaginado las reacciones de mi mujer, mientras otro hombre la follaba y jugaba con ella, que con solo pensar en ello, me provoca la erección de turno y me dan ganas de tocar algo más que el teclado.

Si, desde el principio me he imaginado la fantasía con alguien sin una relación previa.

Pero, últimamente he leído algunos consejos y comentarios de gente con experiencia que creen que para una primera relación lo mejor para la mujer sería alguien conocido que le inspirase confianza y tranquilidad.
Es una idea que desde el principio había rechazado, soy una persona muy discreta y nunca había pensado mezclar amistad y sexo, pero… ¿si esa teoría no fuese del todo tan descabellada?

Así, que por si acaso, ahora tengo que cambiar el chip y pensar si pudiese haber algún candidato dentro de nuestros círculos de conocidos, y añadir a mi fantasía anterior otra en la que no haya que irse tan lejos.

jueves, 6 de septiembre de 2012

TIPO



No me gusta demasiado la palabra cornudo. Creo que normalmente se usa de forma peyorativa, pienso que esta palabra está ligada a la mentira de una parte de la pareja a la otra y evidentemente en  este tipo de situaciones este engaño no existe al haber un consentimiento para que tu mujer se acueste con quien desee.


Aún así al estar tan extendida incluso en los blogs de esta temática, pues lo acepto y la utilizaré
Por tanto digo bien clarito y bien alto que mi mayor deseo es ser cornudo.

¿Y de qué tipo?. Pues existen numerosas variantes dentro de esta fantasía, cada persona evidentemente lo vive de una forma.

Yo soy de tipo mirón o bien de tipo “oyente”. Quiero decir me gustaría estar presente mirando sin apenas participar o bien me gustaría que mi mujer se acostase con otro sin estar yo delante y que luego me lo contase con pelos y señales. Creo que sin estar yo participando se desinhibiría más y ella tendría una experiencia mucho más agradable.  Para mí en ambas situaciones el morbo sería brutal.

miércoles, 5 de septiembre de 2012

FANTASÍAS






Iré directamente al grano, mi principal, morbosa y excitante fantasía sexual es compartir a mi bella mujer con otros hombres.
Me encantaría verla jugar con otras pollas y me encantaría verla disfrutar del sexo con otras personas.

Una vez explicada la temática de este blog, que no deja de ser una pequeña válvula de escape personal, voy a presentarme por si alguien llega hasta este rincón de internet y creé mínimamente interesante esto que escribo.

Soy una persona normal, uno más de las miles de personas que te puedes cruzar a diario por la calle, normal físicamente, normal de complexión, con sus amigos y sus hobbies. Con un par de años sobre los cuarenta y casado hace más de una década con una mujer ocho años menor que yo.

Pero esta persona normal, tiene un pequeño secreto, que es la fantasía que relataba al principio y que hasta ahora solo conozco yo, mi mujer y ahora usted que lo acaba de leer.

Si, mi mujer sabe que si cumpliese esa fantasía, yo sería una persona muy feliz. Casados, como ya he comentado hace bastante tiempo, ninguno tenemos secretos ni tabúes en esto del sexo. Hablamos abiertamente y no nos ocultamos nada. 

Con tanta empatía, ¿Cuál es el problema entonces? Pues que a ella no le interesa o por lo menos hasta el momento no le ha interesado ni lo más mínimo esta práctica sexual.
Al principio de comentárselo de hecho le parecía mal y una aberración, después poco a poco y con mis explicaciones fue entiendo algo el morbo, placer, excitación y demás sentimientos que esta fantasía en mi despertaban.

Quizás algún día se decida, quien sabe, quizás esto solo quede siempre dentro de mi cabeza, no lo sé, mientras tanto seguiré fantaseando y haciendo alguna pequeña aportación a este modestísimo blog.
Si a alguno le interesa algo más sobre este tema cuckold, de cornudos, de tríos…solo tiene que visitar en mi perfil alguno de los blogs que sigo y que alguno es una auténtica obra maestra de la temática.

Un saludo